¿Sabéis que mientras jugábamos en el patio nos ha venido a visitar un payaso de verdad? Si si...no os podéis imaginar como corrían vuestros niños detrás del payaso para saludarle y darle un beso o un abrazo.
El payaso ha estado con nosotros durante todo el recreo, pero este payaso era un tanto particular y vuestros niños rápidamente se dieron cuenta de ello.
Nuestro "nuevo amigo" tenía un problema... estaba triste, no sonreía... ¿Qué le pasaría a nuestro payaso?
Una vez terminado el patio todos nos fuimos a nuestras clases a desayunar, pero había un tema de conversación que no se paraba de escuchar ¿Por qué estaba triste el payaso?
Todos estaban tan preocupados que comenzaron a imaginar qué le pasaba... algunos dijeron que tenía sueño, otros que se había enfadado con su mamá, otros pensaron que tenía miedo del león y por ello se había escapado del circo...tan preocupados estaban todos que fuimos a visitarlo a su pequeña carpa situada en el aula de psicomotricidad.
Allí estaba nuestro payaso, triste y escondido... teníamos que ayudarle...por ello decidimos indagar qué le pasaba. Utilizamos la técnica de la entrevista y con nuestro micrófono y por turnos fuimos haciendo preguntas. Así descubrimos que su nombre era Florisa, que se había perdido y que por eso estaba tan triste. Los niños intentaron darle soluciones para volviera a su circo...-¡Coge un autobús!- decían algunos - ¡Llama a Miliki!- decían otros...
Al final decidimos entre todos que la mejor manera de hacerle reír era cantando y bailando, así que pusimos música de Miliki y...
¡LO CONSEGUIMOS! ¡EL PAYASO VOLVIÓ A SONREÍR!
Si vosotros queréis también alegraros el día os dejo las canciones que hemos utilizado:
Ahora entiendo lo que me contaba Guille del payaso!!!! Qué buena idea, aunque espero que se alegrara y sonriera la pobre Florisa.
ResponderEliminarUn ratito con nuestros peques y seguro que se anima!!!